Valencia SAD, la respuesta está en la bolsa (2ª parte): «Un momento de transparencia»

VALENCIA. Nadie lo duda. Aficionados, abonados, accionistas actuales y potenciales, autoridades públicas y, sobre todo, las entidades de crédito acreedoras. El Valencia CF ha elegido el camino correcto para sanear su maltrecha economía

Pero vayamos por partes. Lo primero que hay que asumir es que el Valencia CF debe desnudarse para vender las acciones propiedad de la Fundación. Me explico. Desde el 1 de julio de 2005, existe un régimen común para toda la Unión Europea donde a través de una Directiva y un Reglamento europeos, de obligatorio cumplimiento, se describen las informaciones necesarias que hay que explicar en el folleto informativo y que cualquier inversor desearía y debería conocer antes de comprar acciones. Este régimen europeo común también es el que se aplicaría a la venta de acciones del Valencia CF. No es difícil entender el porqué de este régimen común, al fin y al cabo, la Fundación podría vender las acciones a inversores de toda Europa.

Este famoso folleto informativo comprende un conjunto de informaciones muy relevantes del club y la legislación exige que deba ir firmado por persona con capacidad suficiente para acreditar el contenido y su veracidad. Este acto no es baladí ya que el firmante adquiere una responsabilidad civil llegando a responder por daños y perjuicios. El que miente, paga.

Pues bien, aquí es donde surgiría la primera duda. ¿Quién debe firmar el folleto que se entregará al señor Segura?. En principio, seguro el oferente, es decir, el vendedor, es decir, la Fundación, por ejemplo, su presidente, es decir, Társilo Piles. Pero la Fundación no tiene personalidad jurídica propia. ¿Quizá entonces deberían firmar los patronos? También firmará el Valencia CF. Será el que explique las cuentas financieras ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Será interesante conocer quienes serán los responsables.

Con firma acreditada, el folleto explicará, sin lugar a dudas, la situación patrimonial del club de los tres últimos ejercicios contables. Por lo que se analizará de nuevo la gestión económica de los últimos presidentes del club desde 2007. Sabremos de donde vienen los ingresos (por competiciones, por abonados y socios, por retransmisión, por comercialización y publicidad… también subvenciones), y dónde se gastan (básicamente, gastos de personal y otros aprovisionamientos). Seguramente se dé mucho detalle de las deudas con entidades de crédito y también con otros clubes de futbol, así como la situación fiscal del club frente a la administración tributaria. Es de esperar que se conozcan los contratos de los miembros de los órganos de administración con el propio Valencia CF.

En este mismo apartado del folleto se dará a conocer con todo lujo de detalles los accionistas principales del club, aquéllos que posean más del 0,5% del capital. Si existen operaciones vinculadas entre accionistas y el propio club. Parece que si y lo explicarán (lops contratos importantes, como venta de terrenos, etc). En definitiva, el aficionado del Valencia CF conocerá qué es lo que está comprando.

Respecto del proceso de venta que se recogerá en otro documento parte integrante del folleto, el vendedor (la Fundación) describirá el proceso de venta. Me imagino que derivado del proceso de Nueva Rumasa, la venta de acciones se articulará a través de la participación de una gran entidad crédito valenciana como intermediario autorizado que tutela este proceso. En este apartado se describirán los valores que se ofertan, las acciones del Valencia CF, los derechos políticos que asisten a los accionistas, derechos de información, asistencia, voto… Incluso se describirá el derecho a dividendos (en este instante me lloran los ojos, continuo y acabo).

Como habrán comprobado en estos dos últimos párrafos, la Comisión Nacional del Mercado de Valores exigirá en aras a una mayor protección de los chés que el Valencia CF se desnude. Lo curioso es que para vender las acciones se tendrá que realizar un esfuerzo tremendo en todos los sentidos. Mientras que con esta misma documentación se podría acceder a cotizar en bolsa. Eso si, en este último caso el Valencia CF se quitaría la ropa en tiempo real. No tendría vuelta atrás. Creo que el esfuerzo valdría la pena.

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